lunes, 18 de agosto de 2014

Box.

"En la vida como en el box, no pierde quien se cae, si no el que no se levanta".

Frase dicha por Esteban, mi entrenador de box, un día como muchos tuve un ataque de depresión y para variar y no perder costumbre, logró levantarme. 

¿Que por qué estoy obsesionada con entrenar? Muchos me han cuestionado la intensidad con la que entreno. Que puedo lastimarme, que mis articulaciones no son fuertes, que tengo un horrendo nudillo nuevo, que me lleno de moretones, que dos horas y media son demasiado. Bueno aquí varias de las razones por las que me gusta: Una de ellas es que por fin encontré algo soy muy buena y me gusta. Definitivamente nunca fui una persona deportista, lo más cercano que he estado fue ser parte de la selección de volleyball en la preparatoria y la verdad es que eramos un pésimo equipo, jamás ganamos nada que no fuera aplausos al final de los partidos de quienes nos llegaban a ver y eso ni nuestros novios nos veían. Como sea, resulta que soy buena para hacer combinaciones, soy rápida y he aprendido rápido a colocar los golpes.

Otra de las razones es porque me da seguridad en el sentido de que hay algo que definitivamente puedo controlar, controlar por completo, no me refiero al deporte en sí, porque aun me falta mucho. Hablo de controlar mis asistencias a los entrenamientos, puedo controlar mi cuerpo, mi respiración, la forma en la que me paro y abro compás para no perder el equilibrio, el movimiento de mis brazos, de cintura, espalda; incluso controlar el dolor físico que he sentido, el cansancio. Ha sido una actividad que me ha ayudado a sobrellevar momentos en los que no tenía cabeza para nada y sólo me concentraba en ese instante, en escuchar a Esteban y corregir y repetir y repetir y repetir hasta que sale. El ponerle rostro a la gobernadora y contraer músculos para soltar un golpe fuerte, colocado. Porque confieso que la sensación de golpear fuerte no se compara con nada, ni el sonido de la gobernadora con el guante, ni el llegar a los 306 golpes en un minuto, sólo control.

Sin duda alguna porque me gusta ganar, porque me gusta demostrar que puedo, porque soy una persona competitiva y me gusta que me reten, cosa que sucede con frecuencia, y se den cuenta que no me pueden ganar tan fácil, me gusta la sensación de poder que me genera la seguridad que he desarrollado. Me gusta ser la mejor, punto. 

Por vanidad, si fuera pecado mortal seguro sería vanidad, bueno... o ira, ¿lujuria? bueno, el caso es que también lo hago por verme bien, ¿a quién no le gusta verse bien?, quien diga que no le importa eso es porque jamás se ha visto bien, no tiene caso profundizar más.

Porque tengo curiosidad de saber cuáles son mis limites, si de verdad el cuerpo siempre sigue a la mente, o es al revés. Quiero saber hasta dónde puedo llegar.

Y sobre todo porque me debo y le debo a Esteban que hace mucho dejó de ser mi entrenador para ser mi amigo, porque cree en mi más de lo que yo lo hago y ojalá algún día entienda lo mucho que ha hecho por mi, por ayudarme a ponerme en pie; nos debo que el tiempo extra que él me dedica tenga frutos; le debo y me debo dedicación, constancia y disciplina, cualidades que quien me conoce sabe que disto mucho de sobrarme de ellas; nos debo aferrarnos lo suficiente a algo que no nos deje caer y nos permita concentrarnos y volver a creer en nosotros; nos debo no perder una motivación más; nos debo que cada palabra que me ha dicho para empujarme a ser mejor sepa que retumba en mis oídos; nos debo que esas dos horas que entrenamos nos olvidemos de absolutamente todo, abogados, trabajo, escuela, niñas, quincena, el conchas, suegra, prejuicios, y seamos lo mejor que podamos y un poco más. Siempre un poco más.

Por eso me gusta hacer box no importan los moretones o lo mucho que se me hinchen las muñecas. Y aunque probablemente nunca me suba a un ring, imaginarnos en las Vegas con batas de Nuria "la sicaria" Martínez, definitivamente me hace sonreír.

Buenas noches.
Nuria.


1 comentario:

  1. Cada día que pasa te reconoces mas, te das cuenta el control de tus acciones tu lo puedes tener, si...TU. Con la misma pasión con la ves el box, fortalece todas tus habilidades y capacidades y te darás cuenta que eres inteligente, fuerte, apasionada y hermosa. SÓLO TIENES QUE CREERTELO. Te amo

    ResponderEliminar